domingo, 26 de diciembre de 2010

En el cajón de las metáforas IV

Antero Duks

Las dos ranas y el balde de leche

Sucedió una vez que dos ranitas salieron a dar un paseo. Como hacían a menudo, recorrían los prados que rodeaban su charca saltando alegremente. Hasta que un día sucedió algo totalmente inesperado: tras un salto ni más ni menos largo, cayeron dentro de un balde que el granjero había olvidado cerca del establo y que aún guardaba bastante leche.

Al principio las ranitas no comprendían que había sucedido, incluso encontraban divertida la situación. Sin embargo, pronto se dieron cuenta que aquello se estaba convirtiendo en una trampa: por mucho que se esforzaban por salir del cubo, las paredes metálicas eran demasiado lisas y el borde quedaba demasiado alto. Y así lo único que podían hacer era nadar y nadar para no ahogarse en la leche.

Pero el tiempo pasaba y el cansancio comenzaba a apoderarse de ellas.

- ¿Te has dado cuenta que nunca vamos a salir de aquí? - le dijo la ranita mayor a la más joven -. Nuestras patitas no podrán soportarlo mucho tiempo y me temo que nunca saldremos de esta. Moriremos aquí.

- No importa - respondió la otra ranita -. No podemos hacer otra cosa que nadar. Nada y no te lamentes. Conserva y dosifica tus fuerzas.

Y las ranitas siguieron nadando y nadando, nadando y nadando sin descanso. Después de unas horas, la ranita mayor volvió a quejarse:

- Nunca saldremos de aquí, este será nuestro final. Me duelen las ancas y ya casi me es imposible seguir nadando. En verdad ha llegado nuestro fin.

A lo que la ranita pequeña respondió:

- Nada y calla; no pierdas la esperanza. Simplemente confía y sigue luchando.

Y así siguieron, nadando y nadando; pero el tiempo pasaba y sus fuerzas menguaban, pues no paraban de dar vueltas, una detrás de la otra, concentradas en el movimiento de sus patitas y en mantener la cabeza fuera de la leche.

- No puedo más - volvió a quejarse la ranita mayor -. De verdad te digo que ya no puedo más. Ya no siento las ancas, ya no sé si las muevo o no. Comienzo a ver borroso y no sé hacia donde me muevo. Ya no sé nada.

- Continúa nadando - replicó la otra ranita -. No importa cómo te sientas, no pienses siquiera en ello. Sigue adelante, continúa.

Sacaron fuerzas de flaqueza y siguieron nadando y nadando.

Por poco tiempo, pues la rana mayor pronto cejó en su empeño y con apenas un aliento de voz susurró:

- Es inútil. No tiene ningún sentido seguir luchando. No entiendo qué estamos haciendo, por qué he de seguir nadando. Nunca podremos salir de aquí.

- ¡Nada, nada! ¡Sigue nadando!

Y aún reunieron fuerzas para nadar unos instantes más... hasta que la ranita mayor, totalmente exhausta, abandonó y murió ahogada. Y también la ranita más joven sintió la tentación de abandonar la lucha, de dejarse vencer y acabar con aquél sufrimiento, sin embargo siguió nadando y nadando, nadando y nadando mientras se repetía a sí misma:

- Nada, nada. Un poco más, sólo un poco más. Continúa nadando. ¡Nada! ¡Nada!

Pero el tiempo pasaba y la ranita se sentía cada vez más débil. Le dolían las ancas, todo el cuerpo le dolía, pero ella seguía nadando y nadando, moviendo sin cesar sus pequeñas extremidades.

¡Y de pronto sucedió algo sorprendente!

Debajo de sus patitas empezó a notar algo de mayor consistencia que la leche, algo sólido, así que reunió las últimas fuerzas que le quedaban, se apoyó en aquella masa ¡y saltó...! pasando justo por encima del borde del balde, para ir a dar a la seguridad del prado.

¡Con el movimiento continuo de sus patitas la leche había empezado a convertirse en mantequilla! Y la consistencia de la mantequilla le había ofrecido un punto de apoyo desde el cual saltar.

Gracias a la perseverancia en su esfuerzo y a que no se había dejado derrotar por el cansancio o el sin sentido, había sido capaz de de transformar una situación en verdad terrible en una ocasión de liberación.

En los momentos menos fáciles lo único que no podemos perder es la esperanza.

Neuroderecho

 

Entendiendo la mente de los criminales

 

Por: Alberto Carrara

Diciembre / 2010

 

 

Neuroderecho o neuroley son nuevos conceptos de nuestra época "neuroantropocéntrica" caracterizada por la primacía de una explicación a nivel cerebral de todas las dimensiones de lo "humano". 

 

Estos términos ni siquiera aparecen en la famosísima enciclopedia libre Wikipedia. Al "googlear" (nuevo término utilizado por los aficionados de Google) estas palabras, uno se queda asombrado: ya existen numerosos sitios compuestos con esta palabra: neuroderecho.com, neuroderecho.net, neuroderecho.info son simplemente algunos ejemplos de una copiosa lista.

 

Ya el diario ABC de Madrid, en un reportaje del 12 de marzo de 2007 (p. 79), hablaba sobre las argumentaciones de los entusiastas del NeuroDerecho.  ¿Entonces de qué estamos hablando?

 

La temática es realmente nueva por el reciente éxito tanto en la prensa científica como en la general. Desde junio de 2002, precisamente después del "nacimiento" oficial contemporáneo de la neuroética que tuvo lugar en San Francisco con ocasión del congreso titulado Neuroethics: Mapping the Field promovido por la Universidad de Stanford y de California, empezaron una serie de publicaciones, la mayoría en lengua inglesa, sobre neurociencia y derecho.

 

Simplemente para entender la dimensión del fenómeno de la relación neurociencia-derecho, se puede recordar cómo en 2004 la Royal Society de Londres dedicó un número monográfico de la revista Philosophical Transactions a esta temática emergente. En 2006 la misma sociedad científica inglesa actualizó y volvió a editar un segundo volumen sobre neurociencia y derecho.

 

Importante en este ámbito se considera el libro editado en 2004 por Brent Garland titulado Neuroscience and the Law, que contiene artículos del célebre neuropsiquiatra americano y "padre" de la neurociencia cognitiva, Michael S. Gazzaniga. En 2007, la prestigiosa revista American Journal of Law & Medicine divulgó un número monográfico sobre el Brain Imaging and the Law, es decir, acerca de la relación entre las imágenes de resonancia magnética funcional y el derecho.

 

La cuestión de cómo las evidencias neurocientíficas sobre nuestro cerebro pueden influir en la jurisprudencia se vuelve aun más patente en el número especial que edita en 2008 la revista Behavioral Sciences and the Law. Último en mencionar, aunque no lo sea cronológicamente, es el volumen que se publicó en la segunda mitad de 2008, Neuroscience in the Courtroom: What Every Lawyer Should Know About the Mind and the Brain, que presentaba todo lo que un buen abogado tiene que saber acerca de la mente y del cerebro para ser eficaz en un proceso penal.

 

La teoría nunca se queda en el aire sino que, antes o temprano, se convierte en hechos concretos, reales y tangibles. Fue así que las hipótesis neurocientíficas dieron origen a la primera sentencia europea en la cual se ha reducido la pena a un asesino por tener en cuenta su estado cerebral y genético.

 

Se analizaron  imágenes de resonancia magnética funcional y el estado genético de cinco variantes "alélicas". La noticia publicada por la revista científica Nature el 30 de octubre de 2009 con el titulo Lighter sentence for murder with 'bad genes'; y se refiere al hecho controvertido que sucedió en el norte de Italia.

 

En septiembre de 2009 un juez del Tribunal de Apelación de Trieste sentenció la reducción de la pena a 8 años y 2 meses para Abdelmalek Bayout, un ciudadano argelino que en 2007 atacó y asesinó brutalmente a un hombre colombiano simplemente por haberle insultado.

 

¿Cómo se llegó a una tal despenalización?

 

El juez italiano, para aclarar si Abdelmalek Bayout padeciese de una enfermedad mental, mandó hacer un análisis detallado sobre el estado psicofísico del asesino. Fueron nombrados dos especialistas en la materia, un neurocientífico molecular y un neurocientífico cognitivo. Después de numerosos estudios, los datos emergentes detectaron algunas anomalías en los resultados de neuroimagen y en cinco genes asociados, como reporta cierta literatura científica, a un comportamiento violento.

 

Entre los genes alterados estaban los MAOA, responsables de la producción de un enzima que toma parte en el metabolismo de los neurotransmisores a nivel cerebral. Los científicos concluyeron que el asesino por su estructura genética y cerebral estaba predispuesto a un comportamiento violento bajo estímulos ambientales adversos.

 

Con estos datos en la mano, el juez italiano decretó la reducción de la pena.  

 

Llegando a este punto, como bien se preguntó la revista Nature, ¿las evidencias científicas actuales avaloran las conclusiones del relato?

 

Ya en 2002, un estudio dirigido por Terrie Moffitt, un genetista del Instituto del Psiquiatría del King's College de Londres, demostraba cómo niveles bajos de expresión de MAOA se asociaban a la agresividad y a una conducta criminal en jóvenes muchachos criados en un ambiente hostil (revista Science, 2 de agosto de 2002, Vol. 297, n. 5582, pp. 851-854). 

 

Este dato podría ser interpretado de manera sumaria y reductiva si no se tomara en cuenta la complejidad de nuestro sistema genético. Hoy en día no se conoce cómo actúa en su conjunto el genoma, es decir, los más de 19 mil genes humanos. También se tendría que tomar en cuenta el posible efecto protectivo de diferentes genes que pueden anular el efecto patológico de un gen "enfermo".

 

Más aun, un juicio prudente no puede fundarse en un análisis genético que involucre simplemente unos cuantos genes. Y si esto no bastara, hay fuertes evidencias en la literatura científica de que los efectos de genes MAOA considerados "patológicos" varían notablemente entre los distintos grupos étnicos (Biol Psychiatry: 60 (7): 684-689, 1 de octubre de 2006). 

 

A fin de cuentas, como bien subrayó Nita Farahany de la Universidad de Nashville, especialista en cuestiones legales y éticas emergentes de la neurociencia y de la genética del comportamiento, el punto clave de la pobreza científica de los estudios realizados es que no se puede hoy en día explicar comportamientos individuales simplemente con análisis neurocientíficos y genéticos, ni siquiera de los más avanzados (revista Nature del 30 de octubre de 2009, Lighter sentence for murder with 'bad genes').  

 

No es la primera vez en la historia que se utilizan evidencias genéticas para defender la hipótesis de que un individuo sufra una predisposición a un comportamiento violento. El primer intento se realizó en 1994 en Estados Unidos con el caso denominado Stephen Mobley. Muchos de estos intentos fueron vanos y esto prueba cómo los jueces tienden a rechazar la idea de que una persona humana no tenga control sobre sus actos deliberados a causa de sus genes o de su cerebro.

 

La estructura biológica del ser humano no lo determina de manera estricta. El hombre sabe ir más allá de su biología. Es normal que cuando ésta se enferme, sobre todo si se refiere al órgano cerebral, toda la persona sufra alguna descompensación.

 

El hombre es una unidad donde conviven dos principios, no dos substancias: el material y el espiritual, cuerpo y alma. Como afirma el antropólogo Lucas Lucas, "el organismo viviente funciona como un todo; es un unum per se en el que todas las funciones están armonizadas en un sistema unitario" y "esta unidad funcional del organismo humano, ya desarrollado y diferenciado, depende esencialmente del encéfalo" (Explícame la persona, ART, Roma 2010, pp. 253-254). Esta dependencia no equivale a identidad.

 

Aquí, en el campo muchas veces malentendido de la identidad entre biología y biografía, se juega la relación entre neurociencia y derecho que conlleva toda la problemática de la libertad de la persona humana y de su capacidad de tomar determinaciones de manera consciente y libre. 

 

No es el cerebro quien se presenta al banquillo de los acusados, sino que es toda la persona humana en su integridad la que es llevada frente un juez para responder de sus acciones.

 

Como recuerdan José M. Giménez-Amaya y José I. Murillo en su estudio acerca de la mente y del cerebro frente a la neurociencia contemporánea, el extraordinario progreso de la neurociencia ha suscitado el convencimiento de estar cerca de desentrañar el misterio global de la organización del sistema nervioso y de las funciones superiores del hombre (Mente y cerebro en la neurociencia contemporánea. Una aproximación a su estudio interdisciplinar, Scripta Theologica, vol. XXXIX, fasc. 2, mayo-agosto 2007, pp. 607-635).

Aunque la neurociencia se sitúe en la vanguardia de todas las ciencias, no puede medir empíricamente la espiritualidad humana. Esta dimensión se descubre de una deducción racional a través, por ejemplo, de tres hechos fundamentales de los cuales todos tenemos experiencia: la precariedad de nuestra estructura biológica, nuestro conocimiento intelectual, y nuestras decisiones libres y voluntarias.

 

Los dos estudiosos españoles remarcan como una postura antropológica de reduccionismo neurobiológico, como la que se está dando en algunos de los casos de neuroderecho y neuroley, no hace bien a la ciencia misma porque oculta la existencia de una parte de la realidad así que el resultado final es un hombre a mitad (Neurociencia y libertad. Una aproximación interdisciplinar, Scripta Theologica, vol. XLI, fasc. 1, enero-abril 2009, pp. 13-46). La neurociencia necesita un nuevo enfoque integral sobre la persona humana.

 

El antropólogo Lucas Lucas sintetiza esta visión integral afirmando que "el hombre es un ser en el que se hace patente la espiritualidad no sólo en su inteligencia y voluntad, sino también en su estructura biológica. Su precariedad instintiva requiere la presencia del espíritu para poder sobrevivir y dejar espacio al pensamiento y a la libertad" (Explícame la persona, p. 203).

 

Tal precariedad biológica conlleva también la posibilidad de que una estructura como la genética o la cerebral se dañen. Esta visión deja además abierta la posibilidad efectiva del influjo del medio ambiente sobre la estructura psico-bio-física del hombre, influjo que modula y no determina rígidamente el todo.

 

Es necesario conocer cómo nuestros genes y nuestra estructura cerebral influyen en nuestros comportamientos recordando, como se puede leer en uno de los comentarios al artículo de Nature del 30 de octubre de 2009

(http://www.nature.com/news/2009/091030/full/news.2009.1050.html), que los genes no producen malas personas: los genes producen proteínas.

 

Concluyendo, son necesarios la relación y el dialogo interdisciplinar entre neurociencia, filosofía y derecho a fin de profundizar en el misterio de la persona humana y de integrar todos las aportaciones para facilitar al juez una clave de interpretación de la conducta humana que sea lo más integral posible.

 

 



Ley Peña, atentado contra México

Por: Jorge Madrigal Fritsch

Septiembre / 2010

 

 

¿Que es eso de la "Ley Peña"? Es una disposición a todas luces contraria a los principios democráticos que, se supone, son la base y la legitimidad de nuestra Constitución Política y de nuestra vida institucional.

 

La democracia es un sistema de gobierno basado en la intervención del pueblo en el gobierno o el predominio del pueblo en el gobierno político de un estado.

 

Una doctrina es un conjunto de ideas u opiniones sustentadas por una persona o grupo y política es la actividad de quienes rigen o aspiran a regir los asuntos públicos.

 

Por política también se entiende la actividad del ciudadano cuando interviene en los asuntos públicos con su opinión, con su voto o de cualquier modo.

 

Un partido político es el encargado de reclutar candidatos para ocupar los cargos gubernamentales y los cargos legislativos. Para eso movilizan el apoyo electoral. También organizan la labor legislativa, articulan y agregan nuevos intereses y preferencias de los ciudadanos.

 

Los partidos son esenciales para estructurar el apoyo político a determinados programas, intereses socioeconómicos y valores. Agregan las preferencias de los ciudadanos, forman gobiernos y establecen acuerdos políticos en el ámbito legislativo.

 

Todo lo anterior nos sirve de referencia para tratar de entender lo que pretende, lo que busca una ley del Estado de México que elimina los enunciados que hemos descrito.

Esta ley prohíbe a los partidos políticos de ese estado postular a un candidato común y de forma independiente.

 

¿Quién me puede prohibir en este México querido que vote por quien me dé la gana? Nadie.

 

¿Quién nos puede prohibir en este México querido que un grupo de personas asociadas de cualquier manera lícita postulemos a una persona para un puesto de representación pública? Nadie.

 

¿Quién les puede prohibir en este México querido a los partidos políticos postular a quien se les dé la gana? Los legisladores del Estado de México y su gobernador, Enrique Peña Nieto.

 

Así de absurdo como se oye, así de absurdo como se lee, fue elaborada esta ley, que nos anuncia una regresión de 100 años, precisamente al tiempo del Porfiriato.

 

No se vale que un partido político utilice este tipo de acciones regresivas e inmorales, con tal de perpetuarse en el poder.

 

Este hecho nos indica, a mi manera de ver, que siguen existiendo priístas que añoran los tiempos de la "dictadura perfecta", que afortunadamente para nuestro país ya no existe ni debe volver a instaurarse.

 

Los mexicanos tenemos memoria y no somos tontos, aunque haya quien crea lo contrario.

Mexicanos: muchas vidas y mucho esfuerzo nos ha costado construir esta nación. No admitamos este tipo de retrocesos.

 

Escucha este podcast aquí

 

 

LA VERDADERA CONEXION: LA CONCIENCIA SOCIAL

 

Parte de la conciencia de uno mismo, de estar conscientes de nuestras emociones, su significado y consecuencias. Estas habilidades hacia adentro de nosotros mismos, se complementan en nuestras vidas de seres humanos, lanzándose hacia afuera, hacia las emociones que recibimos y enviamos de y hacia el mundo de los demás y que significan nuestra verdadera conexión y representan a la conciencia social.

 

A esta conexión normalmente se le conoce como empatía y en su forma más básica se produce en la interpretación de las expresiones en los rostros de los demás, así como los tonos y fortaleza de la voz.

 

Esta conexión nos permite sintonizar o no con otra persona y desde luego sincronizar las emociones y obtener acercamientos y rechazos, gustos y disgustos, agrados y desagrados.

 

 

 



¡¡¡OH PRI!!!...

 

Sí, el sempiterno y omnímodo partido político mexicano

 

Por: Enrique Galván-Duque Tamborrel

Febrero / 2010

 

 

 La bancada del PRI en el Senado presentó su iniciativa de Reforma Política que modifica 31 artículos constitucionales, donde destacan la suplencia del Ejecutivo en caso de falta y la ratificación del gabinete.

 

Al presentar el proyecto el líder de los senadores del Partido Revolucionario Institucional (PRI) Manlio Fabio Beltrones señaló que plantean la reelección consecutiva legisladores federales y locales, así como la reducción del Senado y la Cámara de Diputados.  Ahora proponen lo que por mucho tiempo se opusieron.

 

Además proponen modificar la figura del fuero constitucional y formato del Informe presidencial, regular el Estado de Emergencia, crear el Instituto Nacional de Identidad e implementar la Consulta Popular.  Cuestiones que para ellos era intocable

 

También se incluyen reformas en materia del Presupuesto de Egresos y Cuenta Pública y la reconducción de la Ley de Ingresos para eliminar las llamadas partidas secretas.  Posición clara si ya nos son ellos los mangoneadores.

 

En la iniciativa los priistas proponen reestructurar la facultad de investigación de la Suprema Corte de Justicia de la Nación (SCJN) y las atribuciones de la Comisión Nacional de los Derechos Humanos (CNDH).

 

Beltrones explicó que en el caso de la suplencia en caso de falta del Ejecutivo sea el Secretario de Gobernación, quien se encargue del despacho del mandatario federal mientras el Congreso nombra al sustituto.

Pero en ese tiempo el secretario de Gobernación restringirá su función en la Presidencia a simplemente administrar los asuntos ordinarios y no podrá tomar decisiones trascendentales ni destituir a los miembros del gabinete.

De igual manera, el planteamiento priista considera que el Senado ratifique a los miembros del gabinete presidencial, con excepción de los titulares de la Secretaría de la Defensa Nacional y de la Secretaría de Marina.

 

Los senadores tendrían 30 días para ratificar al gabinete a partir de que se reciba la propuesta del presidente; si no hay un pronunciamiento en este plazo, el funcionario en cuestión se tendrá como ratificado.

 

Si el dictamen fuera negativo, el Ejecutivo deberá enviar una nueva propuesta en un plazo no mayor a diez días, y si no la presenta en tiempo y forma, el puesto se considerará vacante y el presidente podrá designar un encargado de despacho hasta por 30 días.

 

En caso de producirse una segunda votación en sentido negativo por parte del Senado, el Ejecutivo podrá nombrar libremente al funcionario en cuestión, pero en ningún caso podrá designar a alguno de los dos rechazados.

 

También se plantea modificar los mecanismos de control parlamentario para emitir una moción de censura a los secretarios de Estado que puede culminar en un apercibimiento o la remoción de los mismos.

 

Para esto se elimina el juicio político cuando se trata de los secretarios de Estado y de los titulares de las paraestatales, pues se contaría con el mecanismo de la moción de censura.

 

En cuanto al Informe presidencial se propone que el Ejecutivo federal presente un informe por escrito al Congreso de la Unión y que acuda al recinto parlamentario para pronunciar un mensaje en la tribuna. Ahí, cada grupo parlamentario expresará su opinión, y tanto este como el presidente de la República tendrán derecho a una réplica.

 

Además, el presidente de la República podrá asistir, si así lo cree conveniente, a las sesiones de cualquiera de las dos cámaras, e intervenir en tribuna para exponer sus proyectos de ley, facultad que podrá delegarse en los secretarios de Estado.

 

De igual manera, se incluye la reelección para los diputados federales y locales hasta en dos ocasiones para completar un periodo de 9 años, mientras que los senadores se podrán reelegir una sola vez para sumar un máximo de 12 años.

 

En cuanto a la reducción de los integrantes del Congreso, se plantea que el Senado sea integrado por 96 Senadores en lugar de los 128 actuales, con lo que se eliminan los 32 parlamentarios de representación proporcional, y habría tres por cada estado y la capital.

 

En el caso de la Cámara de Diputados se establece una reducción para pasar de los 500 actuales a 400, de los cuales 300 serían de mayoría relativa, y 100 de representación proporcional.

 

En materia de las reformas presupuestal y de Cuenta Pública, se prohíbe la existencia de partidas secretas de cualquier tipo en el Presupuesto de Egresos de la Federación.

 

También se plantea eliminar la facultad de investigación de la SCJN para transferirla a la Comisión Nacional de los Derechos Humanos, y se elimina la prohibición de esta para conocer de quejas en contra de actos u omisiones de naturaleza administrativa del Poder Judicial.

 

En materia del Estado de Emergencia, el PRI planteó que la suspensión de derechos y garantías que demande el Ejecutivo sea aprobada por el Congreso de la Unión y no la Comisión Permanente.

 

Sin embargo, se prohíbe suspender ciertas garantías como el derecho a la no discriminación, la prohibición de la pena de muerte, el derecho al reconocimiento de la personalidad jurídica, a la integridad personal, al nombre y a la protección.

 

La iniciativa del PRI incluye un régimen transitorio para que las reformas sobre la ratificación del gabinete presidencial entren en vigor el 1 de septiembre de 2012, año en el cual también se aplicaría la reelección inmediata de legisladores.

 

La reforma del Informe presidencial llevaría a cabo a partir del año 2011, según la propuesta priista, que fue turnada a comisiones para su análisis y dictaminación. .

 



La paz es belicosa


La paz verdadera no es fruto de estructuras políticas u organismos internacionales. Nace en el alma de cada hombre y de allí se expande hasta permeabilizar toda la sociedad.


Por: Querien Vangal

 

 

La violencia y la inseguridad ha comenzado a ser un tema recurrente en países en los que el problema del narcotráfico empieza a cobrar víctimas inocentes y ajenas a este negocio; la paz encabeza la lista de muchas de las peticiones dirigidas a Dios, incluso en algunas personas alejadas antes de cualquier tipo de religiosidad.


Todos queremos la paz y la pregunta fundamental es: ¿cuál es la vía para llegar a la paz?


«He venido a traer fuego sobre la tierra y ¿qué quiero sino que arda?» (Lc 12,49). El entonces cardenal Ratzinger, comentando esta cita del Evangelio, opinaba que es quizá una de las sentencias más importantes pronunciadas por Jesucristo sobre la paz; en ella Jesús nos está enseñando una gran verdad: «que la verdadera paz es belicosa, que la verdad merece sufrimiento y también lucha. Que no puedo aceptar la mentira para que haya sosiego» (J. Ratzinger, Dios y el mundo, Círculo de Lectores, Barcelona 2005, p. 210)


Es común encontrar personas que piensan que alcanzaremos la paz cuando organizamos una estructura de seguridad confiable o establecemos un organismo de protección civil infranqueable, pero esto aún es poco. Podríamos contar con todas estas cosas, pero todavía estaríamos viviendo una paz de caricatura y postiza, que no ha llegado a la raíz del problema y al corazón de cada hombre de nuestra sociedad.


Hay que dejar claro que todos los medios que se pongan a nivel externo son necesarios y que se requiere una organismo que garantice la seguridad de los ciudadanos. Estas soluciones traerán seguramente estabilidad y quietud, pero no hay que ser ingenuos para pensar que con esto se llega a la concordia auténtica entre los hombres.


La paz verdadera no es fruto de estructuras políticas u organismos internacionales. Nace en el alma de cada hombre y de allí se expande hasta permeabilizar toda la sociedad. Es, por lo tanto, consecuencia de una elección personal.


¿Elección de qué cosa? Elección de la verdad. La paz genuina se logra con la aceptación de la verdad en la propia vida. Por esto mismo es belicosa, porque aceptarla y vivir de acuerdo con la ella muchas veces significa ir contra corriente y quedar mal ante los ojos de muchos.


No hay que pensar ahora en los delincuentes como la única fuente del problema. Cada uno debe entrar en sí mismo y preguntarse hasta qué punto ha pactado ya con la mentira y vive en el engaño. Y este pactar con la mentira puede ir de las cosas más simples como la famosa "mordida" al oficial de tránsito (que en otros términos es la acción de dar el dinero de la multa al policía para su uso personal) hasta una vivencia disfrazada o incluso traicionera de mi vocación como esposo(a), padre/madre, profesional, religioso(a).


En un futuro puede que los problemas de violencia y terrorismo desaparezcan, que cesen las fechorías y más hombres decidan dejar las armas a un lado, pero aún así muchas personas seguirán viviendo en la inseguridad, en la congoja y zozobra, ya que la paz efectiva no está fuera, está dentro del corazón. Se la encuentra en la medida en que se busca, se acepta, se vive y se defiende la verdad en la propia vida, que no es otra cosa sino coherencia entre lo que se es y lo que se profesa. Llegar a este nivel de paz requiere lucha, pues se trata de una conquista personal de quien acepta vivir en la verdad.


El Papa Benedicto XVI explica cómo aceptar la verdad es abrir la puerta para que entre Dios en nuestro corazón. De lo contrario, «cuando el hombre pierde de vista a Dios fracasa la paz y predomina la violencia, con atrocidades antes impensables, como lo vemos hoy de manera sobradamente clara» (Benedicto XVI, Jesús de Nazaret, Planeta Colombiana, Bogotá 2007, p.114).

 

 



La historia de Fátima

Antero Duks


En una ciudad del más lejano occidente, vivía una muchacha llamada Fátima, hija de un próspero hilandero. Un día su padre le dijo:




- Hija, haremos un viaje juntos. Tengo que resolver algunos asuntos en las islas del Mediterráneo, y puede que tú encuentres por allí un joven apuesto y de buena posición con el que te puedas casar.



Se pusieron en camino y viajaron de isla en isla. Mientras su padre se ocupaba de sus negocios, Fátima soñaba con el marido que pronto podría tener.



Pero un día, cuando se dirigían a la isla de Creta, se desató una tormenta y el barco naufragó. Fátima, casi inconsciente, fue arrastrada hasta una playa cerca de Alejandría. Su padre había muerto y ella quedó completamente desamparada.



La experiencia del naufragio y el hecho de haber sufrido las inclemencias del mar la habían dejado exhausta, y apenas vagamente conseguía recordar su vida hasta ese momento.



Una familia de tejedores la encontró deambulando por la playa. Pese a ser pobres, la recogieron, la llevaron a su humilde casa y le enseñaron su oficio. Así fue como Fátima comenzó una nueva vida, y dos años más tarde volvió a ser feliz, una vez reconciliada con su suerte.



Pero un día, cuando se encontraba en la playa, la sorprendió un grupo de mercaderes de esclavos, y de repente se encontró prisionera en un barco junto a otros cautivos.



Durante el viaje, Fátima se lamentaba amargamente de su destino, pero ellos no mostraron ninguna compasión: la desembarcaron en Estambul y la vendieron como esclava. Era la segunda vez que su mundo se desmoronaba.



En el mercado no había demasiados compradores. Uno de ellos era un hombre que buscaba esclavos para trabajar en su aserradero, donde fabricaba mástiles para embarcaciones. Cuando advirtió el abatimiento de la infeliz Fátima, decidió comprarla, pensando que podría ofrecerle una vida un poco mejor que la que tendría en manos de otro comprador.



La llevó a su casa, con la intención de que fuera la criada de su esposa. Pero al llegar, supo que había perdido todo su dinero: unos piratas le habían robado un importante cargamento de mástiles. Ahora ya no podría hacerse cargo del sueldo de sus empleados, y a partir de ese momento, la dura tarea de fabricar mástiles quedó en manos de él, su mujer y Fátima.



La muchacha, agradecida a su amo por haberla rescatado, trabajó tan arduamente y con tanto ahínco que él decidió concederle su libertad. Fátima continuó trabajando como mano derecha del fabricante de mástiles, y así llegó a ser relativamente feliz con su tercera profesión.



Un día su patrón le dijo:



- Fátima, quiero que tú y mi agente viajen a Java, con un cargamento de mástiles. Traten de venderlos a un buen precio.



Iniciaron la travesía. Pero cuando el barco estaba frente a la costa China, un tifón lo hizo naufragar. Una vez más, Fátima se encontró abandonada en una playa de un país desconocido. Y lloró nuevamente con amargura, porque sentía que en su vida nada ocurría como ella esperaba. Siempre que las cosas parecían andar bien, sucedía algo que echaba por tierra sus esperanzas.



- ¿Por qué - se preguntó por tercera vez - siempre que intento hacer algo no sale bien? ¿Por qué debo sufrir tantas desgracias?



Como no obtuvo respuesta, reunió fuerzas, se levantó y se alejó de la playa.



En China, nadie había oído hablar de Fátima ni de sus problemas. Sin embargo, existía una leyenda que decía que llegaría un día una mujer extranjera, capaz de hacer una tienda para el emperador. Como en aquella época no había nadie en China que supiera hacer tiendas, todos esperaban con ansiedad el día en que se cumpliese la profecía.



Para tener la certeza de que la extranjera, al llegar, no pasase inadvertida, una vez por año, los sucesivos emperadores de China solían enviar mensajeros a todas las ciudades y aldeas del país para pedir que toda mujer extranjera fuera llevada a la corte.



Precisamente ese día, Fátima, agotada, llegó a una ciudad de la costa de China. Los habitantes del lugar hablaron con ella a través de un intérprete y le explicaron que debía presentarse ante el emperador.



- Señora, ¿sabes fabricar una tienda? - le preguntó el emperador cuando Fátima estuvo ante él.



- Creo que sí - respondió ella.



Fátima pidió cuerdas, pero no tenían. Recordó entonces sus tiempos de hilandera, consiguió lino y ella misma las fabricó.



Después pidió un tejido resistente, pero los chinos no tenían el tipo que ella necesitaba. Entonces, poniendo en práctica los conocimientos que había adquirido con los tejedores de Alejandría, fabricó un tejido fuerte, apropiado para fabricar una tienda.



Se percató también de que necesitaba estacas, pero tampoco había en todo el país. Recordó lo aprendido con el fabricante de mástiles de Estambul y fabricó unas cuantas estacas resistentes.



Cuando todo el material estaba listo, se esforzó por recordar todas las tiendas que había visto en sus viajes. Y así Fátima consiguió construir una hermosa tienda.



Cuando tal maravilla fue mostrada al emperador de China, éste se dispuso a satisfacer cualquier deseo que Fátima expresase. Ella quiso quedarse en China, Y allí se casó con un apuesto príncipe y, rodeada de sus hijos, vivió muy feliz hasta el fin de sus días.



A través de esas aventuras, Fátima comprendió que todas aquellas experiencias que había tenido en diferentes momentos de su vida y que le habían parecido tan desagradables, constituyeron una parte esencial en la construcción de su éxito y felicidad.



Haremos un negocio los dos, dijo el Seño a un hombre. Así, juntos emprendieron la difícil tarea de enderezar a la humanidad. ¿Quién es ese hombre? Tú.